El diputado Raúl Puy recorrió las instalaciones del parador Azucena Villaflor de Vincenti en el barrio de Constitución, y le llamó la atención el funcionamiento del establecimiento al constatar que dentro de la casa cumplen servicio integrantes de la Policía Metropolitana, quienes se encuentran armados y en pleno contacto con la población residente, además de la presencia del personal de seguridad tercerizado.
"Este tipo de políticas totalmente contradictorias con el estado de derecho demuestran una vez más que los vecinos de la ciudad de Buenos Aires que necesitan pernoctar en lugares que garanticen sus derechos, no siempre son bienvenidos cuando al recibirlos se los estigmatiza de "violentos", imponiéndoles una fuerza de seguridad que garantice el orden".
Por otra parte, teniendo en cuenta que se trata de un parador que recibe sólo a madres con hijas e hijos resulta alarmante que una fuerza de seguridad desarrolle tareas afines o similares a la de los operadores sociales durante las 24 horas con esta población, - hecho que se contradice con los tratados internacionales de Derechos Humanos, como por ejemplo la Convención Internacional de los Derechos del Niño-.
"A pesar de la situación de vulnerabilidad de las familias, a la que se suma la inseguridad interna, el establecimiento no cuenta con un servicio de urgencia médico permanente, que incluya un referente en psicología, psiquiatría y enfermería durante las 24 horas, que garantice el derecho de un acceso digno a la salud", concluyó Puy.